Cobardes no nació para seguir a nadie. Desde su formación en 2016, esta banda navarra ha demostrado que no le deben nada a nadie. Sí, reconocen sus influencias. ¿Y qué? ¿Acaso Marea, La Fuga o Extremoduro no bebieron también de alguien? Lo que distingue a Cobardes es la autenticidad con la que caminan su propio camino, sin pedir perdón ni permiso.
Liderados por Javier Janices ‘Cordobés’, Cobardes nació como un proyecto personal, pero pronto se convirtió en una máquina perfectamente afinada, con Iñigo Idoate (batería), Iñigo Álvarez (guitarra) e Iban Sánchez (bajo) completando la formación. Con un arranque fulgurante que incluyó la victoria en certámenes como el Avetoro Fest y los Encuentros de Jóvenes Artistas en 2018, empezaron a sonar con fuerza en la escena. En 2020, lanzaron su primer álbum, Ceniza y viento, producido por Kolibrí Díaz, que pudo haber sido el comienzo de algo grande, si no fuera por una pandemia que cortó el vuelo de su presentación en directo.
Pero los verdaderos guerreros no se detienen. En 2023, con más ganas y una madurez que solo da el tiempo, Cobardes volvieron con Que Empiece El Baile. Y no fue solo un título, fue una declaración de intenciones. Regresaron para recordarnos que el rock urbano sigue siendo la banda sonora de los que no se rinden, de los que cargan con sus cicatrices como si fueran medallas.
Si aún no conoces a Cobardes, aquí te presentamos las cinco canciones más escuchadas de la banda, y te aseguramos que después de escucharlas, no podrás quitártelos de la cabeza.
1. Romeo y Julieta
Aquí no hay príncipes ni finales felices. En Romeo y Julieta, Cobardes nos muestran lo que pasa cuando dos personas que se aman no saben más que hacerse daño. El paralelismo con los personajes de Shakespeare está ahí, pero esta es una versión cruda y actual. La relación se convierte en un ciclo de atracción y rechazo, donde ninguno puede soltar al otro, pero tampoco pueden salvarse. Esta canción encapsula la tensión de un amor condenado, y la brutalidad con la que a veces el amor se convierte en una guerra sin tregua.
2. Rodeada de Idiotas
La letra de Rodeada de Idiotas es un bofetón a la superficialidad que nos rodea. Aquí, el protagonista observa con frustración cómo la persona a la que amaba está inmersa en un mundo lleno de conversaciones vacías y personas que no la valoran. Mientras él sigue atrapado por los recuerdos y el dolor de lo que fue, ella parece estar rodeada de gente que solo se interesa por lo superficial, preguntando si bebe, si fuma, si ha venido sola. Esta canción es un grito de rabia contra el vacío emocional en el que muchos se pierden, disfrazando su soledad con fiestas y sonrisas forzadas.
3. En Llamas
Si alguna vez una relación se ha consumido ante tus ojos, En Llamas será como mirar un espejo. La canción utiliza la potente imagen de una «casa en llamas que no sabe arder» para describir el momento en que el amor muere, pero no de golpe, sino en un lento y doloroso proceso donde lo único que queda es silencio. El narrador se despide sin posibilidad de segundas partes, aceptando que lo que tenían ya no volverá. Es una canción sobre la aceptación del fin, pero con un desgarro que se siente en cada palabra.
4. Caminos de Algodón
Este tema es pura poesía. Caminos de Algodón es un adiós sin rencor, lleno de buenos deseos para la persona que se va. A diferencia de las demás canciones, aquí no hay reproches ni heridas abiertas, solo un deseo genuino de que la otra persona encuentre paz en su camino. El uso de «caminos de algodón» como metáfora sugiere suavidad y tranquilidad, un contraste con las emociones que suelen acompañar una despedida. Pero en esta canción, Cobardes nos muestran que el adiós también puede ser una forma de amor.
5. Quinientas Mil Mañanas
En Quinientas Mil Mañanas, Cobardes lleva el desamor a otro nivel. Aquí, el protagonista está al límite, desgastado por completo tras haber dado todo de sí en una relación que lo ha dejado vacío. «Te regalé mi vida entera, y tú me diste noches en vela», es una frase que resume perfectamente el sacrificio que ha hecho por alguien que no supo corresponderle. Es una canción intensa, cruda, y que te atrapa por la honestidad con la que refleja el agotamiento emocional de amar a alguien que te ha roto en mil pedazos.
Cobardes no necesitan pedir perdón por ser quienes son. Esta banda ha vuelto para recordarnos que el rock urbano no ha perdido su relevancia, que sigue siendo el refugio de los que viven al límite, de los que no aceptan la derrota y de los que encuentran en cada cicatriz una razón para seguir adelante. Si aún no los conoces, estas cinco canciones son solo el principio. Escúchalos, siente cada palabra y deja que Cobardes te lleve de la mano por su universo, donde el amor, el desamor y la lucha constante son los protagonistas.
Y recuerda, como bien dicen ellos:
que la vida te lleve por caminos de algodón, pero no te olvides de bailar en cada uno de ellos.
Poesía hecha artículo del mismo modo que Cobardes elevan el Rock urbano a la categoría de Arte. Llevan la pasión, el amor y el desamor a otro nivel, al punto de verte reflejado cuan espejo en sus letras.
Nos tocan el corazón estos chicos. Mi primer directo fue en Cascante, luego siguió Zaragoza, Logroño, Tarragona y Trillo. En esta gira no voy a poder cuadrar ninguno más. Pero ahí sigo, escuchando su música incluida en mi carpeta de favoritos con el resto de grandes: Robe, Marea, Bocanada y Mala Hierba.
Maravilla pura… Yo ya estaba perdiendo la fé en la música y aparecieron ellos! Son enormes!!!
Han sido un soplo de aire fresco, han repescado de nuevo a mucha gente para el rock.